Años después de haber filmado El Exorcista, el cineasta y escritor William Friedkin se cambia de la ficción a la realidad con este documental. Lo que empezó como una breve conversación entre Friedkin y e padre Gabrielle Amorth, el exorcista jefe de la diócesis de Roma durante 30 años, se transformó en una oportunidad única cuando el padre Amorth accedió a que Friedkin pudiera filmar un ritual de exorcismo. Sería el noveno exorcismo de un mujer afligida dolorosamene y sería filmado por Friedkin a solas, con una pequeña cámara digital que capturaría todo lo que sucediera. Combinando el material filmado de este exorcismo con entrevistas a sacerdotes, psicólogos, neurocirujanos y no creyentes, Friedkin nos guía hacia el mundo crepuscular entre los límites de lo que conocemos y lo que no es posible conocer.
Combinando el material filmado de este exorcismo con entrevistas a sacerdotes, psicólogos, neurocirujanos y no creyentes, Friedkin nos guía hacia el mundo crepuscular entre los límites de lo que conocemos y lo que no es posible conocer.