Tras ser proclamado emperador, César declara el fin de la guerra y anuncia cinco días de fiestas. El precio de la victoria es la su nominación sin precedentes para una dictadura de 10 años, que es apoyada por Cicerón y Bruto. Mientras Lucio inicia su campaña como magistrado, Atia continúa humillando a Servilia, aunque niega cualquier relación con su asalto. La relación entre Tito e Irene termina en un desastre.
Mientras Lucio inicia su campaña como magistrado, Atia continúa humillando a Servilia, aunque niega cualquier relación con su asalto. La relación entre Tito e Irene termina en un desastre.