Jennifer Griffith y Sarah Carver trabajaban para la Administración de Incapacidades y se dieron cuenta de toda esta corrupción de primera mano. Escribieron a la Administración de la Seguridad Social, escribieron a los abogados, escribieron al presidente de los Estados Unidos. Pero sus quejas no tuvieron eco hasta que se publicó el artículo del Wall Street Journal. Entonces, con la atención nacional puesta en Conn, el Senado, el FBI y la SS (que había estado permitiendo el fraude todo el tiempo) finalmente intervinieron. En este cuarto episodio final, Eric Conn hace que el gobierno busque una aguja en un pajar para incriminarle. Los efectos colaterales del fraude le pasan factura a una comunidad de Kentucky, ya de por sí en apuros.
En este segundo episodio, el asesinato de un colaborador político en 2016 da lugar a un sinfín de teorías conspirativas infundadas, mientras la familia del hombre y la verdad penden de un hilo. Tras el asesinato de Seth Rich, sus padres interpusieron una demanda con Fox News después de que se difundieran por internet teorías de conspiración sobre su asesinato. Mary Rich le dijo a la Radio Pública Nacional que el trauma combinado de la muerte de su hijo y los ataques de los teóricos de la conspiración causaron una desconfianza intensa y duradera. Tras resolverse el caso, los padres de Rich dijeron en un comunicado en ese momento que estaban 'complacidos con la resolución de este asunto y esperan sinceramente que los medios tomen precauciones genuinas en el futuro'.
En este segundo episodio, una mujer confiesa que se convirtió en Internet en portavoz del discurso de odio de uno de los tantos grupos de nacionalistas blancos que pululan en Estados Unidos. Y el hecho terminó violencia racista y muerte durante un evento. 'Tuve que empezar a darme cuenta de lo que estaba apoyando. ¿Era la víctima o era también una villana?', dice Samantha mirando a cámara. De la mano del racismo, el verdadero crimen digital no parece tener respiro, y por eso se mostrará cómo funcionan esos supremacistas con buena conexión Wi-Fi.
En este cuarto episodio varias mujeres relatan sus escalofriantes experiencias a manos de un hombre que trataba de extorsionarlas en línea con el objetivo de obtener imágenes y vídeos sexuales. Una mujer nos cuenta: 'Yo recibí un mensaje de un hombre que decía: Envíame una foto desnuda o te asesino'. Esta joven logró sumar su caso al de otras mujeres que se animaron a denunciar para exponer al acosador. Nadie es del todo invisible en Internet.
En el quinto episodio veremos desde fraudes con bebés de peluche falsos hasta el delito fiscal. Una persona se plantea si podría hacer ingresos de dinero a nombre de personas muertas. Resulta que si se puede. También veremos un intento de fraude de dos piratas informáticos al IRS: el organismo federal de Estados Unidos encargado de la recaudación fiscal. Estos hábiles hackers analizan los esquemas cibernéticos y terminan en el punto de mira de las autoridades.
En este cuarto episodio final, Eric Conn hace que el gobierno busque una aguja en un pajar para incriminarle. Los efectos colaterales del fraude le pasan factura a una comunidad de Kentucky, ya de por sí en apuros.