A las once en punto de la Nochevieja del Calendario Cósmico, surgió el Homo erectus, liberando sus manos y ganando para nuestra especie su nombre. Empezaron a explorar, a arriesgarse para llegar a nuevos lugares. Nuestros parientes los neardentales vivían y hacían muchas de las cosas que consideramos que son 'humanas'. Más inquietos que sus primos Neandertales y Denisovanos, nuestros antepasados Homo sapiens cruzaron océanos y paisajes despiadados, cambiando el paisaje y la atmósfera, hasta llegar a causar extinciones masivas. La comunidad científica le ha dado a esta era el nombre de 'Antropoceno'. Desde las primeras civilizaciones nos hemos preguntado si había algo en la naturaleza humana que contiene las semillas de nuestra propia destrucción. Syukuro Manabe nació en el Japón rural y tomó interés en la temperatura media global de la Tierra. Durante la década de 1960 reunión evidencias para predecir el incremento en la temperatura del planeta debido a los gases de efecto invernadero hasta que convertirlo en un lugar inhabitable y tóxico que podría conducir a nuestra extinción. 'Esto no tiene que pasar', nos dice Neil deGrasse Tyson, 'No es demasiado tarde. Hay otros caminos, otros futuros que aún podemos tener; encontraremos una manera'.
Las regiones polares de nuestro planeta pueden parecernos inalcanzables. Pero no están lejos de nuestra influencia. Involuntariamente, nosotros estamos cambiando los mundos de hielo. Y estos cambios no solo afectarán a los polos, sino que a todo el planeta. En la implacable frontera del cambio climático, los osos polares, las morsas, las focas y los pingüinos están viendo su gélido Edén en peligro.
Un bosque tropical es el hábitat más rico sobre la Tierra. Se desconoce exactamente cuántas especies hay en las selvas tropicales, pero son millones. Y cada semana se descubren nuevas especies. Hay algunas, como la pantera nebulosa, de las que no se sabe casi nada. A pesar de que cubren solo un 7 % del área terrestre del mundo, las junglas tienen un papel vital en la salud del planeta. Las selvas son el hogar de una increíble variedad de especies como los pájaros del paraíso, los inteligentes orangutanes y las hormigas cortadoras de hojas.
Inmensos cardúmenes se amontonan en nuestros mares poco profundos. Peces pequeños que a su vez alimentan a los más grandes. Las ricas aguas cercanas a la costa son las áreas de pesca de nuestro planeta y pueden aportar abundante alimento para la vida salvaje y para la humanidad. Los mares que bordean la tierra suponen menos de una décima parte de los océanos del mundo, pero el 90% de las criaturas marinas viven en las aguas costeras, desde los temibles tiburones hasta los humildes erizos. Proteger estos hábitats es una batalla que la humanidad debe ganar.
Un quinto del terreno de nuestro planeta está cubierto por desiertos. Los desiertos pueden parecer estériles y vacíos, pero son de importancia crucial para la vida. Para aquellos que pueden sobreponerse a sus desafíos, los desiertos proporcionan un refugio vital. Las praderas son uno de los paisajes más productivos de nuestro planeta. Mantienen a las agregaciones de herbívoros más grandes de la Tierra. Las cámaras seguirán a los elefantes del desierto buscando sustento, a los bisontes vagando por las praderas de Norteamérica y a una manada dominante de guepardos.
Desde las primeras civilizaciones nos hemos preguntado si había algo en la naturaleza humana que contiene las semillas de nuestra propia destrucción. Syukuro Manabe nació en el Japón rural y tomó interés en la temperatura media global de la Tierra. Durante la década de 1960 reunión evidencias para predecir el incremento en la temperatura del planeta debido a los gases de efecto invernadero hasta que convertirlo en un lugar inhabitable y tóxico que podría conducir a nuestra extinción. 'Esto no tiene que pasar', nos dice Neil deGrasse Tyson, 'No es demasiado tarde. Hay otros caminos, otros futuros que aún podemos tener; encontraremos una manera'.