El centro de nuestra galaxia alberga un monstruo invisible de un poder inimaginable: un agujero negro supermasivo llamado estrella Sagitario A, con cuatro millones de veces la masa del Sol. Recientes avances astronómicos han confirmado no solo la existencia de agujeros negros como la estrella Sagitario A, sino que estos extraños objetos invisibles pueden ser los protagonistas galácticos definitivos. Las impresionantes imágenes generadas por ordenador nos llevan a presenciar los orígenes ardientes del agujero negro de nuestra galaxia hace 13.600 millones de años, cuando el universo primitivo albergaba enormes estrellas azules que, cuando se quedaron sin combustible, colapsaron bajo su propia enorme masa, aplastandose en un objeto tan pequeño y tan denso que perforó un agujero en la estructura del universo. Durante miles de millones de años, la estrella Sagitario A se dio un festín con el gas y las estrellas cercanas y con fusiones cataclísmicas con otros agujeros negros. Un descubrimiento revolucionario realizado por el telescopio de rayos gamma Fermi de la NASA ha demostrado que nuestro agujero negro tenía el poder de esculpir toda la galaxia, creando vastas burbujas de gas por encima y por debajo de nuestra galaxia e incluso protegiendo sistemas estelares como el nuestro. En una alucinante conclusión, Brian Cox revela cómo nuestra comprensión moderna de los agujeros negros está desafiando nuestros conceptos de realidad hasta el punto de ruptura. Al tratar de comprender el destino de los objetos que caen en la estrella Sagitario A, los científicos han llegado a una conclusión sorprendente: el espacio y el tiempo, conceptos tan fundamentales para la forma en que experimentamos el mundo que nos rodea, no son tan fundamentales como alguna vez pensamos.
El profesor Brian Cox examina lo que depara el futuro en su exploración acerca del lugar de la humanidad en el cosmos. En Florida, aprende sobre los últimos esfuerzos para proteger la tierra de potenciales catástrofes, como un asteroide que se dirija a la tierra. En el National Ignition Facility de California, es testigo del experimento de fusión nuclear con más éxito del mundo, afirmando que puede abrirnos el camino a las estrellas
¿Podría tener la fusión nuclear la respuesta el problema energético? Es el proceso que ha forjado toda la materia del universo. Ilumina las estrellas y transforma los átomos más ligeros que se formaron en el Big Bang en átomos más pesados. ¿Serán capaces los científicos de poder aprovechar la energía de fusión y lograr energía abundante, barata y limpia?" En 'Cómo construir una estrella en la Tierra', Brian Cox va más allá de la mirada de nuestro Sol para revelar las fuerzas ocultas que proporcionan su poder. Descubre cómo esta energía de fusión ha mantenido nuestra estrella más cercana ardiendo durante cinco mil millones de años. Brian cree que la humanidad debe construir una estrella en la Tierra para asegurar su supervivencia.
Lyman-alpha es una estructura en forma burbuja que contiene innumerables galaxias y quizá es la estructura más grande del universo observable. Las Radio Galaxias contienen gas que emite ondas de radio y son acúmulos de galaxias producidas al chocar y fusionarse entre ellas. Descubre cual es el más grande de los planetas, estrellas, acúmulos estelares, constelaciones, agujeros negrosa, volcanes, galaxias, explosiones, lunas, tormentas y cráteres de impacto del espacio.
Encendidas por el poder del átomo, arden con luz, calor y violencia. Las estrellas son cualquier cosa menos pacíficas. Colisionan, se devoran una a otras y explotan como enormes supernovas, las mayores explosiones que se pueden ver en el universo.
Las impresionantes imágenes generadas por ordenador nos llevan a presenciar los orígenes ardientes del agujero negro de nuestra galaxia hace 13.600 millones de años, cuando el universo primitivo albergaba enormes estrellas azules que, cuando se quedaron sin combustible, colapsaron bajo su propia enorme masa, aplastandose en un objeto tan pequeño y tan denso que perforó un agujero en la estructura del universo. Durante miles de millones de años, la estrella Sagitario A se dio un festín con el gas y las estrellas cercanas y con fusiones cataclísmicas con otros agujeros negros. Un descubrimiento revolucionario realizado por el telescopio de rayos gamma Fermi de la NASA ha demostrado que nuestro agujero negro tenía el poder de esculpir toda la galaxia, creando vastas burbujas de gas por encima y por debajo de nuestra galaxia e incluso protegiendo sistemas estelares como el nuestro.
En una alucinante conclusión, Brian Cox revela cómo nuestra comprensión moderna de los agujeros negros está desafiando nuestros conceptos de realidad hasta el punto de ruptura. Al tratar de comprender el destino de los objetos que caen en la estrella Sagitario A, los científicos han llegado a una conclusión sorprendente: el espacio y el tiempo, conceptos tan fundamentales para la forma en que experimentamos el mundo que nos rodea, no son tan fundamentales como alguna vez pensamos.