La Tierra es perfecta: su tamaño, la distancia al Sol, su giro e inclinación, la Luna... Todo se adapta perfectamente a la existencia del ser humano y las fuerzas naturales del planeta construyen la vida. Sir David Attenborough narra la nueva producción de BBC Earth que analiza, en cinco episodios, cómo las fuerzas de la naturaleza impulsan y dan forma a la vida en la Tierra. En el primer episodio se examinan los volcanes, que son no solo los generadores de la atmósfera de la Tierra, sino además los verdaderos arquitectos del planeta. Más del 80% de la superficie terrestre es el resultado de las erupciones de magma. Los volcanes producen la plataforma donde se sustenta la vida.
La laureada directora Agnès Varda y el artista gráfico urbano y fotógrafo JR (Jean René), un joven francés conocido por sus impactantes y enormes intervenciones gráficas en calles y tejados por todo el mundo toman parte en un proyecto de arte especial. Juntos viajarán a través de Francia en un camión equipado como un puesto portátil de impresión mientras toman fotografías de la gente y sitios del país. Con esa inspiración, crearán pinturas murales colosales de individuos, comunidades y lugares a los que quieren celebrar. Durante el trayecto, la veterana cineasta y el joven artista disfrutarán de una inesperada amistad mientras charlan y exploran sus visiones del mundo.
El cineasta Ali Tabrizi examina el daño que los humanos infligen sobre unos mares vulnerables. Desde los plásticos y las redes de pescas contaminando las aguas, a los destrozos irreparables de la pesca de arrastre sobre el fondo marino, y a las prácticas devastadoras de la pesca ilegal, la humanidad está asolando la vida marina y, por extensión, el planeta entero. Lo que Ali Tabrizi destapa no solo desafía la noción de pesca sostenible, sino que afecta a cualquiera que se preocupe de las maravillas del océano, así como del futuro del planeta y a nuestro sitio en él. De los creadores de Cowspiracy, sigue esta continuación que ilumina las alarmantes y no bien conocidas verdades sobre la destrucción medioambiental producida por la conducta humana sobre nuestros océanos.
¿Qué clase de civilizaciones alienígenas podrían existir en la vastedad del espacio? Terra es el mundo imaginado en el cuarto episodio, un planeta de 9.000 millones de años de antigüedad, el doble que la Tierra. Suficientemente antiguo para que una inteligencia verdaderamente avanzada haya evolucionado. Una vez fue un mundo fértil, pero ahora esta desierto. Pero la vida puede aún prosperar en recintos cerrados artificiales. Con el tiempo, los seres que lo habitan han evolucionado para no necesitar sus cuerpos y existen solo como tejido neuronal. Ni envejecen ni mueren y son servidos por robots. Si las civilizaciones alienígenas son tan probables estadísticamente, ¿por qué los astrónomos no han encontrado signo alguno de ellas? ¿Dónde están todos? Cada vez que los buscamos en una estrella individual es como recoger un cubo de agua en el océano. Vamos a tener que mirar un buen número de estrella y buscar en un montón de datos hasta que encontremos la pista que nos lleve a otra civilización.
El mundo imaginado Eden orbita no una estrella, sino dos. La luz de sus estrellas gemelas potencia la fotosíntesis, bombeando más oxígeno en su atmósfera que en la Tierra, permitiendo prospera a la vida. Los herbívoros están en constante alerta porque el bosque es el hogar de predadores perfectamente evolucionados para vivir entre los árboles. En el tercer episodio se tratará también el papel que podrían desempeñar los hongos en los exoplanetas. El ecologista Thomas Crowther nos habla del papel que las redes de micelio juegan en el bosque de Rothiemurchus en Escocia.
En el primer episodio se examinan los volcanes, que son no solo los generadores de la atmósfera de la Tierra, sino además los verdaderos arquitectos del planeta. Más del 80% de la superficie terrestre es el resultado de las erupciones de magma. Los volcanes producen la plataforma donde se sustenta la vida.