Ludo Lefevbre acude a mentores como Alain Passard y Mark Meneau, chefs con una obsesión casi patológica por los ingredientes culinarios. Sus ojos brillan cuando describe las langostas de Bretaña, las ostras de Cancale y una multitud de otras extraordinarias joyas de la alta cocina. En este episodio, exploraremos como el botín marino culinario de Francia es uno de los mejores del mundo, analizando sus ingredientes y su maneras de cocinarlos.
En otra época la cocina francesa era dominada por la cocina animal. Pero ahora, los vegetales tienen un papel central en algunas de las cocinas más respetadas de París. Para los chefs de Ludo Lefebvre Alain Passard e Iñaki Aizpitarte, los vegetales ofrecen un potencial ilimitado, la oportunidad de cocinar con productos de temporada, de ese día, de ese momento. La huerta es el lugar donde los ingredientes de algunos de los platos favoritos de Ludo Lefevbre son cultivados y recolectados. Para los los chefs de hoy en día, sus horticultores son tan respetados como sus carniceros. En este episodio, Ludo explora los vegetales, la huertas y su uso para preparar sus menús. También descubriremos como el terreno es tanto un lugar como un sabor.
La carga de trabajo de un chef famoso, especialmente de uno que regenta tres restaurantes de éxito y un una franquicia, es alta. La preocupación diaria para asegurar la calidad y la consistencia en sus establecimientos te mantiene lo suficientemente ocupado. Y si a esto le añadimos las entrevistas, las sesiones fotográfica, las apariciones en la televisión y la presencia online constante, la tarea se vuelve hercúlea. Cuando Ludo Lefebvre necesita escapar del caos, se dirige al poético mundo de París en primavera, donde el énfasis se pone en la alegría de vivir.
Un bistro se define típicamente por su modestia, son relativamente pequeños, baratos y sin pretensiones. Los bistros se han hecho bastante ubicuos pero, a pesar de sus muchas modalidades, en el fondo son lugares donde se puede comer, y comer bien. Con su Petit Trois, Ludo Lefebvre ha llevado el espíritu de los bistro a Los Ángeles. En este episodio, Ludo nos llevará a París para presentarnos algunas de las personas y sitios que le inspiraron en su carrera culinaria.
Ludo Lefebvre dependió y aprendió de algunos de los chef más estimados de Francia, pero se mudó a Los Ángeles, formando una familia y empezando una dura revisión de los restaurantes para figurarse que quería hacer realmente con su futuro culinario. Este episodio examina los lazos entre los artistas y su educación, y como la ilusión infantil puede, de hecho, traducirse en una carrera. Ludo cuestiona si un artista sigue su instinto, su entrenamiento o su intuición... o quizá las tres cosas.
En este episodio, exploraremos como el botín marino culinario de Francia es uno de los mejores del mundo, analizando sus ingredientes y su maneras de cocinarlos.