Todos sabemos que mentir es vergonzoso. Pero seguimos engañando deliberadamente al otro constantemente. ¿Están nuestros cerebros cableados para mentir desde una temprana edad? Los cerebros de los mentirosos patológicos pueden darnos pistas. ¿La tecnología hará más fácil ser deshonestos o puede algún día revelar instantáneamente que alguien miente? Quizá somos engañados porque nuestros limitados sentidos evitan que veamos la realidad. Los científicos dicen que nuestra memoria nos engaña y pueden implantar memorias falsas en ratones. Otros científicos buscan la verdad definitiva en el mundo cuántico subatómico.