Stop Making Sense
1984 Arte
En el transcurso de 3 noches en Diciembre de 1983, el cineasta Jonathan Demme unió fuerzas creativas con los Talking Heads... y ocurrió el milagro. Con un concepto escénico de David Byrne, esta eufórica película de concierto trasciende su género para llegar a ser la más grande de su clase. Una cura garantizada para el desánimo, una celebración de la música que nunca envejece, todo impulsado por la precisión rítmica que fue la carta de presentación de los Talking Heads y la supernova creativa que es David Byrne.