Los humanos han mirado durante mucho tiempo el cielo nocturno, preguntándose si otras formas de vida e inteligencias podrían estar prosperando en mundos mucho más allá del nuestro. Pero en las últimas décadas, los telescopios ultrasensibles y un tenaz trabajo de detectives han transformado la búsqueda de planetas extraterrestres de ciencia ficción a un hecho real. Esperábamos encontrar mundos similares a los planetas de nuestro sistema solar, pero en cambio descubrimos un montón de mundos exóticos. Animaciones de calidad basadas en los datos del cazador de planetas más exitoso, el telescopio espacial Kepler, muestran estos mundos: planetas hinchados con la densidad del poliestireno, mundos inestables que orbitan dos soles a la vez y gigantes gaseosos a 1000 grados con cielos azotados por vientos titánicos. Pero quizás el descubrimiento más sorprendente fue la cantidad de mundos que pueden ser contendientes para una segunda Tierra, a la distancia adecuada de su sol para tener ese ingrediente tan crucial para la vida tal como la conocemos, el agua líquida. Entre otras cosas, somos testigos del descubrimiento más tentador de todos: una llamada 'súper Tierra', situada en la zona habitable, el área a la distancia justa de un sol para potencialmente albergar vida, y con una débil señal de agua en su atmósfera.
Sea testigo de los poderes secretos de animales extraordinarios, experimente el mundo como ellos y vea el lado SUPER/NATURAL de la naturaleza como nunca antes. Producida por James Cameron y narrada por Benedict Cumberbatch, esta serie de documentales utiliza las innovaciones científicas y la tecnología cinematográfica más avanzadas para revelar los poderes secretos y los supersentidos de los extraordinarios animales del mundo. Vea flores como las ve una abeja, escuche conversaciones entre elefantes marinos o vuele a lo largo de un campo de fútbol junto con ardillas que brillan en la oscuridad. Se dice que en la naturaleza solo sobreviven los más fuertes. Pero cuando la cooperación y la comunicación unen a los animales y a las plantas combinando sus superpoderes incluso los más vulnerables pueden volverse imparables. Si crees conocer la naturaleza, vuelve a planteártelo.
Durante décadas algunos han sospechado que podría haber seres inteligentes ahí afuera, capaces de comunicarse con nosotros. Podría sonar como ciencia ficción, pero científicos de todo el globo están escudriñando el universo buscando señales procedentes del espacio exterior. Conseguimos un acceso exclusivo a los archivos del Telescopio Green Bank en su búsqueda de señales de radio de la Estrella de Tabby, una estrella misteriosa que algunos investigadores creen que esta rodeada por una Esfera de Dyson, un inmensa pantalla para recoger gran parte de la energía de su sol.
Todos los días encontramos nuevos sistemas planetarios que se parecen bastante a la Tierra. Las posibilidades de que haya vida en algún otro planeta son bastante altas. Si hubiera vida en el espacio, ¿cómo sería? ¿Podríamos hablar con ellos? ¿Hay alguien ahí fuera que sea como tú y como yo? Para descubrirlo, no solo tenemos que fijarnos en el espacio, también tenemos que mirar aquí abajo. La vida en la Tierra es una intrincada red de organismos muy complejos interdependientes. Astronautas y expertos debaten sobre una pregunta que, de momento, no ha sido posible contestar: ¿hay vida inteligente fuera de la Tierra?
En 1942, a través de un horrendo proceso de ensayo y error, estos Nazis crearon algo enteramente nuevo en la Historia: fábricas de matar, capaces de asesinar a millones. Pero hubo también héroes. Con la escalada de la matanza en Auschwitz y Treblinka, hubo personas que mostraron un enorme valor, como el oficial alemán Albert Battel, que arriesgó su vida para salvar a los detenidos.
Pero quizás el descubrimiento más sorprendente fue la cantidad de mundos que pueden ser contendientes para una segunda Tierra, a la distancia adecuada de su sol para tener ese ingrediente tan crucial para la vida tal como la conocemos, el agua líquida. Entre otras cosas, somos testigos del descubrimiento más tentador de todos: una llamada 'súper Tierra', situada en la zona habitable, el área a la distancia justa de un sol para potencialmente albergar vida, y con una débil señal de agua en su atmósfera.