Cultura

Sigue las sorprendentes e impactantes historias de todo el mundo que nos traen Shane Smith, Ryan Duffy y Suroosh Alvi. Shane viajará a Afganistán donde los talibanes están adoptando nuevas y horrorosas tácticas de terror. Usan a niños para ataques suicidas con bombas desde edades tan tempranas como los seis años. Ryan viaja con rumbo a Filipinas donde los políticos se están matando entre ellos, convirtiéndola en el lugar más peligroso del mundo para un dirigente.

El episodio comienza con Ewan McGregor y Charley Boorman conduciendo a través de las calles de Guanacaste, Costa Rica. Ewan nos presenta a su hija, Jamyan, que se unirá al equipo en este capítulo. La expedición se acerca al volcán Masaya. Las tomas de la hirviente caldera con su lava burbujeante son espectaculares. Al llegar a Honduras se encuentran con unos miembros de UNICEF, que nos muestran la tarea que están realizando en la zona.

Esta es la historia de Gerald Cotten y los muchos inversionistas que terminaron con las cuentas bancarias vacías después de invertir en su mercado de criptomonedas de Bitcoin, QuadrigaCX. ¿Qué hace un mercado de criptomonedas? La película lo explica de manera concisa: Gerald Cotten recoge tu inversión y la convierte en Bitcoins y luego mercadea con ellos con la esperanza de obtener beneficios. Cotten es descrito como un inadaptado que funda en el mundo de las criptomonedas una comunidad con personas similares.
Cotten enfermó en la India y falleció repentinamente; tenía 30 años. Entonces, QuadrigaCX era el mayor mercado de Bitcoin de Canadá, con más de 200 millones de dólares. Pero nadie podía acceder a las claves de las cuentas de la compañía, y todos los inversionistas se quedaron con las manos vacías. Los foros de internet sostenían que Cotten falseó su muerte y se llevó el dinero. Periodistas y forenses intentarán esclarecer el caso, explorando lo extraño de la historia de Cotten, descartando lo más extravagante, en una búsqueda de la verdad.

Sigue al neoyorquino Colin Beavan y su familia en su intento por abandonar su lujoso estilo de vida de la 5ª avenida para tratar de vivir una vida sin consumo de carburante fósil, intentando reducir su impacto medioambiental.

Jennifer Griffith y Sarah Carver trabajaban para la Administración de Incapacidades y se dieron cuenta de toda esta corrupción de primera mano. Escribieron a la Administración de la Seguridad Social, escribieron a los abogados, escribieron al presidente de los Estados Unidos. Pero sus quejas no tuvieron eco hasta que se publicó el artículo del Wall Street Journal. Entonces, con la atención nacional puesta en Conn, el Senado, el FBI y la SS (que había estado permitiendo el fraude todo el tiempo) finalmente intervinieron.
En este cuarto episodio final, Eric Conn hace que el gobierno busque una aguja en un pajar para incriminarle. Los efectos colaterales del fraude le pasan factura a una comunidad de Kentucky, ya de por sí en apuros.