Protagonizado por figuras de renombre mundial y por los principales científicos del mundo, 'La dieta que nos conduce a la extinción' nos lleva a un viaje sorprendente. Este poderoso documental nos abre los ojos al mostrarnos al elefante haciendo estragos en la cacharerría del que nadie quiere hablar: La producción insostenible de ganado para carne conduce a la deforestación, al aumento de la contaminación y al expolio de recursos. Alarmante y entretenido, el documental te hará no volver a mirar de la misma manera a tu comida o la industria alimentaria. No podemos seguir negando la destrucción de nuestro planeta. Los daños son evidentes y no tenemos otro lugar al que ir. Ha llegado el momento de enfrentarse a la verdad, por incómoda que sea: estamos en tiempo prestado. Pero todos los días tenemos el poder de elegir buenos alimentos para nuestro planeta, nuestro paladar y nuestra salud.
La serie nos lleva a un viaje que deja sin respiración a través de los planetas de nuestro sistema solar. Las impresionantes imágenes incluyen tomas de telescopios de última generación y animación avanzada para disfrutar de encuentros personales con mundos distantes.
Cuerpos que se mueven como goma de mascar, como si sus huesos fueran mercurio, adoptando poses imposibles, cimbreándose, retorciéndose, resbalando sobre sí mismos como olas de aceite sobre un océano de carne y músculo… Eso es el flexing. Más que un estilo de baile: una forma de vida. La manera de sobrevivir en el más lejano confín de Brooklyn, donde acaban todos los metros de la ciudad, para un montón de jóvenes que se enfrentan día a día con el desafío de la jungla urbana. “Flex Is Kings” es también más que un documental: un pedazo de vida, latiendo al ritmo de la ciudad.
Usando tecnología avanzada, un grupo de activistas dirigidos por el ex-entrenador de delfines Ric O'Barry se infiltró en una cueva cerca de Taijii, Japón para mostrar una práctica de extrema crueldad animal que también es un serio peligro para la salud humana". La caza dirigida de delfines se produce en Taiji cada año de septiembre a Marzo. Los informes oficiales de Japón reportaron que sólo en 2007 fueron cazados alli 1.623 delfines para consumo de carne o venta a delfinarios. Estas prácticas han recibido críticas internacionales tanto por la crueldad empleada como por los altos niveles de mercurio en la carne de delfín.
Abrasados por su proximidad al Sol, Mercurio y Venus son mundos hostiles. Uno excavado con crates de colisiones cósmicas y otro un vórtice de azufre, dióxido de carbono y lluvia ácida. Ejemplos claros de planetas fracasados, ¿sirven como un aviso de escenarios ominosos que podrían algún día amenazar la Tierra?
No podemos seguir negando la destrucción de nuestro planeta. Los daños son evidentes y no tenemos otro lugar al que ir. Ha llegado el momento de enfrentarse a la verdad, por incómoda que sea: estamos en tiempo prestado. Pero todos los días tenemos el poder de elegir buenos alimentos para nuestro planeta, nuestro paladar y nuestra salud.