En el quinto episodio veremos desde fraudes con bebés de peluche falsos hasta el delito fiscal. Una persona se plantea si podría hacer ingresos de dinero a nombre de personas muertas. Resulta que si se puede. También veremos un intento de fraude de dos piratas informáticos al IRS: el organismo federal de Estados Unidos encargado de la recaudación fiscal. Estos hábiles hackers analizan los esquemas cibernéticos y terminan en el punto de mira de las autoridades.
Sepp Blatter se enfrenta a una espinosa reelección. Mientras la FIFA busca restaurar su imagen, sigue habiendo interrogantes sobre su futuro. EL FBI empezó a investigar a la FIFA antes de la infame votación de 2010, pero en un año y medio de investigación no averiguaron casi nada, porque no tenían a nadie que les informara. Chuck Blazer era el hombre que necesitaban. Blazer ocupó varios puestos de alto nivel como directivo de fúbol en América antes de convertirse en informador del gobierno sobre la corrupción generalizada en el fútbol tras ser acusado de fraude masivo durante sus años como ejecutivo de la CONCACAF.
En el segundo episodio, vemos las marcadas diferencias entre las modernas y prístinas instalaciones en el piso 19 del edificio Lipstick y lo que ocurría en el desgastado piso 17, donde Madoff dirigía su negocio de asesoría de inversiones y donde se orquestó la mayor parte del fraude, y desde donde el imperio de Madoff se ramificó hacia el negocio de los fondos de cobertura, que comenzó a atraer un escrutinio no deseado. En su disposición, Madoff confirma los nombres de cuatro inversores importantes, entre ellos Jeffry Picower, un cliente muy antiguo en la sombra. Aunque Madoff nunca discutió el asunto con él, se sospechaba que Picower sabía lo que estaba pasando y, por ello, tenía poder para atormentar y extorsionar a Madoff mientras se beneficiaba sustancialmente de su esquema priramidal.
También veremos un intento de fraude de dos piratas informáticos al IRS: el organismo federal de Estados Unidos encargado de la recaudación fiscal. Estos hábiles hackers analizan los esquemas cibernéticos y terminan en el punto de mira de las autoridades.