La serie muestra lo que ocurrió en 1993 en Waco, Texas, cuando David Koresh, el líder de la secta de los Davidianos de la Rama, se enfrentó al gobierno federal en un asedio de 51 días. En el primer episodio, veremos como estalla un primer tiroteo cuando los agentes federales llegan al complejo de la Rama Davidiana con una orden de registro. Más tarde, los negociadores de rehenes intentan sacar a los niños del recinto. David Koresh había llegado a dirigir su secta a través del matrimonio con Rachel Jones (14 años), hija de uno de los dirigentes de la misma y al que arrinconó enseguida, sustituyéndolo en la cima jerárquica. De todas partes llegaban nuevos adeptos ganados por la persuasiva doctrina de un Koresh que había efectuado compras de armas por valor de más de 250.000 dólares, según él para estar preparados llegado el momento del acoso del «Mal» y se dispuso a convertir en un fortín inexpugnable el rancho Monte Carmelo. Las autoridades acusaron a los davidianos de tenencia masiva de armas y de abusos sexuales con los niños que mantenían a su lado. Recibidos a tiros, los agentes contestaron de igual manera, produciéndose entonces un primer balance de cuatro agentes muertos y una decena de sectarios abatidos, entre ellos el propio David Koresh, herido en el costado izquierdo.
'Y Libéranos de la Sequía': En los últimos años, Texas ha experimentado la peor sequía desde que hay registros. El 97% de la comunidad científica está de acuerdo en que la actividad humana es la que produce las patrones extremos de tiempo del mundo. Pero muchos tejanos, legisladores, líderes y ciudadanos, no lo reconocen y no han tomado iniciativa alguna para limitar las emisiones de CO2, las más altas del país. "La maldición de los recursos": Mientras el apetito de la humanidad por la energía crece exponencialmente, la industria rapiña en las más remotas regiones de la Tierra. En Papua New Guinea, la Exxon Mobil extraerá 19 mil millones de dólares en gas natural. Algunos predicen que los conducirá a la guerra civil.
En los 60 y 70, una generación de mexicano americanos, frustrados por la persistente discriminación y pobreza, construyeron una nueva identidad chicana. César Chávez y Dolores Huerta marcharon por la igualdad de salario y de condiciones de trabajo. En libros y películas, Luis Valdez y Corky Gonzalez hablaron de la larga historia de los mexicanos en el Suroeste. En Los Angeles, Sal Castro abogó para que los estudiantes chicanos tuvieran las mismas oportunidades educacionales que los anglosajones. En Texas, José Ángel Gutiérrez creó un nuevo partido político. A finales de los 70, se incorporaron estudios latinos y chicanos en el currículo y los latinos se incluyeron en el proceso político.
Son un mundo oculto de estalactitas, estalagmitas y habitantes que nos deparan un mundo de continuas sorpresas. La Cueva de las Golondrinas en Mexico tiene 400m de caida vertical, lo suficientemente profunda para engullir el Empire State Building. La cueva de Lechugilla en los EEUU, tiene 193 km de largo y 500m de profundidad, contiene asombrosas formaciones de cristales colgando de sus cámaras. La salamandra de las cavernas de Texas no tiene ojos ni pigmentación.
Cabeza de Vaca naufragó en la costa de Texas en 1582 y vivió con los indios durante 8 años. Tras su retorno a España, escribió un libro basado en sus experiencias. Su historia cuenta su empatía y respeto por los indios.
David Koresh había llegado a dirigir su secta a través del matrimonio con Rachel Jones (14 años), hija de uno de los dirigentes de la misma y al que arrinconó enseguida, sustituyéndolo en la cima jerárquica. De todas partes llegaban nuevos adeptos ganados por la persuasiva doctrina de un Koresh que había efectuado compras de armas por valor de más de 250.000 dólares, según él para estar preparados llegado el momento del acoso del «Mal» y se dispuso a convertir en un fortín inexpugnable el rancho Monte Carmelo. Las autoridades acusaron a los davidianos de tenencia masiva de armas y de abusos sexuales con los niños que mantenían a su lado. Recibidos a tiros, los agentes contestaron de igual manera, produciéndose entonces un primer balance de cuatro agentes muertos y una decena de sectarios abatidos, entre ellos el propio David Koresh, herido en el costado izquierdo.